La otra cara de la moneda en las manifestaciones

Por Rubén Alejandro Avendaño Bautista

“Sabemos que hay injusticia en muchos casos, pero una orden es una orden”, dijo Víctor Duarte Silva, ex agente de la Policía Federal Preventiva de México (PFP), en conversación para esta publicación, al referirse a la función que tienen los granaderos en las manifestaciones y la percepción que se tiene de ellos por parte del sector civil.

El objetivo es claro cuando tienen que contener a una multitud que insulta y arremete contra los uniformados. Víctor señala que no deben reflexionar sobre lo que está bien o mal, ya que el peligro de ser lesionados es permanente. “Yo vi compañeros con fuertes cortadas, sin una oreja, con fracturas y tienes que estar atento y dejar de lado tu opinión sobre los manifestantes”.

- ¿Alguna vez pensaste que era injusta la acción de la PFP?

- Muchas veces, la neta te da coraje la forma en que se reprime a las personas que exigen un derecho, pero la chamba es la chamba y tienes que fletarte.

“No sólo participé en manifestaciones, también en operativos de drogas y armamento, ahí está más cabrón, pero sientes menos culpa porque sabes que estas ayudando”

Víctor indica que la perspectiva que tiene la gente de los granaderos es mala, pero ellos también actúan sin pensar en las consecuencias. “No se ponen a pensar en que pueden salir afectadas persona que no tienen nada que ver con su problema, no miden las consecuencias”. Es muy difícil contener a la gente que solo golpea y no razona lo que hace, indicó.

- ¿Porqué te saliste de la PFP?

- El salario no es muy bueno, tienes que andar buscando otras actividades para completar o sacar varo de lo que sale de los operativos, además tengo un chavito de 2 años y no quiero arriesgarle, te puedes echar muchos enemigos y no tiene caso.

“Ahora que estoy de civil me doy cuenta que la gente es muy inconsciente, hacen cada cosa. El otro día fui víctima de una manifestación y dije como no vienen los granaderos y se los chingan, vaya dilema”

Actualmente Víctor se es empleado en la delegación Tlalpan apoyando en el sector de viviendas. Además, ayuda a su papá en un puesto de flores “No me da pena decir que fui PFP, y no me arrepiento de lo que hice, además me ayudó a valorar muchos aspectos de la vida, una orden es una orden y te friegas”.